Siempre antes de empezar con el entrenamiento os aconsejamos estirar, pero de una forma muy suave. Debido a que el músculo está frío, si lo forzamos más de la cuenta podemos llegar a provocarnos una pequeña o no tan pequeña rotura de fibras.
Realmente es tras haber rodado durante un largo tiempo cuando debemos de estirar de una forma más seria, puesto que el músculo estará más caliente y nuestro estado de ánimo más relajado para unos ejercicios que, entre otras cosas, también nos pueden servir a la vez como una forma de recuperar.A la hora de una competición es aconsejable estirar muy suavemente antes de empezar a calentar, tras el calentamiento estiraremos otra vez, esta vez un poco más fuerte, y después de la competición para terminar.
La forma más correcta de llevar a cabo el calentamiento es sin rebotes, quiero decir, de una sola vez progresivamente.
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